El tendón de Aquiles es el tendón grueso fuerte en la parte posterior del tobillo. Dolor en el tendón de Aquiles es una queja común entre los corredores y deportistas, incluso aquellos que no participan en el ejercicio.
Generalmente el dolor de Aquiles puede ser dividido en dolor súbita o gradual. Dolor súbito suele ser el resultado de un desgarro o rotura del tendón. Si bien esto no es poco común, dolor de aparición gradual es más frecuente. Dolor que se desarrolla lenta y gradualmente empeora y suele ser ocasionado por un grupo de lesiones, conocidas como las tendinopatías. Estas son las enfermedades degenerativas del tendón o el paratendón rodea, también a menudo se conoce como tendinitis, aunque esto sugiere la presencia de células inflamatorias que las biopsias no han demostrado.
Otras causas de dolor de aparición gradual podría ser la bursitis de Aquiles o la enfermedad de corta, aunque son menos frecuentes.
La tendinitis de Aquiles puede ocurrir tanto en la porción media del tendón, o en el punto de inserción o un archivo adjunto al hueso del talón. En la tendinitis de la porción media del dolor se encuentra a unos 2 inches por encima del hueso del talón. En los casos de inserción, que está en el punto de unión. Otros síntomas incluyen:
- Rigidez en el tendón, sobre todo después de periodos de descanso.
- El tendón puede parecer más gruesa y de color rojo en comparación con el otro lado.
- Es sensible al tacto del tendón.
- El dolor tiende a facilitar que el tendón se calienta-para arriba y después duele más después del ejercicio.
- Usted puede sentir un pequeño bulto en el tendón (nódulos).
- El tendón puede "crujir" a la circulación.
El tratamiento del dolor de Aquiles causada por una tendinitis inicialmente debería implicar reposo y la aplicación de la terapia fría para aliviar el dolor y estimular el flujo sanguíneo. Cuando el hielo se aplica inicialmente se produce una disminución en el flujo de sangre, sin embargo cuando se retiran después de 10-15 minutos hay un flujo masivo de sangre a la zona. Esto es importante en las lesiones de Aquiles, ya que el tendón tiene un flujo de la sangre baja notoriamente lo que puede hacer la curación lenta.
Otros métodos de tratamiento debe incluir estiramientos suaves del complejo músculo de la pantorrilla, masaje deportivo a los músculos de la pantorrilla y fricciones con el tendón. Ultrasonido o terapia con láser también puede ser eficaz. Levanta el talón se puede colocar en el lugar de forma temporal para ayudar a tomar la tensión de los tendones. Sin embargo, el uso de estos a largo plazo puede conducir a un acortamiento del tendón.
Una vez que el dolor inicial ha disminuido, un programa de fortalecimiento excéntrico puede ser implementado. ejercicios excéntricos implican contraer el músculo mientras se alarga (en oposición a concéntricos - donde se reduce). Este tipo de ejercicio ha demostrado ser más eficaz en el tratamiento de tendinopatías de Aquiles. El ejercicio de caída del talón es la regla de oro aquí, realizado en un paso, a partir de la punta de los dedos del pie y bajar los talones lentamente, bajo el control completo hasta que el talón está por debajo del nivel de la etapa.
A medida que disminuye el dolor, un retorno gradual al deporte se puede implementar, aunque es importante asegurarse de que todos los factores que han contribuido al desarrollo de la lesión se corrigen antes de regresar. Factores causales comunes incluyen músculos de la pantorrilla apretado o débil, pronación, los aumentos repentinos en la actividad, la colina de funcionamiento y uso de tacones altos con regularidad.
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